Cómo elegir el corralito
Los corrales o corralitos debebés son artículos muy convenientes para los padres, ya que permiten que el bebé esté solo en él, convirtiéndose en un área de juegos, mientras los padres hacen otras actividades. A su vez, el corralito se puede usar como zona segura cuando tu bebé empiece a gatear o a dar sus primeros pasos, y necesites contener su espíritu curioso.
Ya que la mayor parte de los corrales son frecuentemente utilizados para viajar, la mayoría de ellos se doblan de forma compacta y también poseen ruedas para facilitar su traslado, las que incluyen un freno de seguridad.
También son muy prácticos para viajar cuando tu bebé es pequeño porque le ofrece un lugar seguro y familiar fuera de casa para permitir que tu bebé se entretenga. Los corralitos también son ideales como cunas para los viajes para que los bebés más pequeños duerman sus siestas.
Tienen una malla transparente para que tu bebé pueda ver todo lo que hay a su alrededor a la vez de que puedas controlarlo.
Se recomiendan adquirir corralitos con estructura reforzada, patas rebatibles, tamaño grande, laterales y caños recubiertos para evitar golpes.
Las paredes o los lados del corral deben ser siempre mayores que la altura del bebé, para prevenir las lesiones causadas por la escalada en sus paredes.
Por último, es conveniente saber de antemano hasta que edad se desea tener al bebé dentro del corralito y adquirir uno con dimensiones acordes a ello.